Los partidos ante Bolivia por las eliminatorias han significado en los últimos tiempos el waterloo de la selección peruana. Lo fue en 2000 cuando la alineación altiplánica terminó por colocar la lápida a los muchachos de Julio César Uribe, así como lo fue el 1 de setiembre del presente, con dos bonitos goles ante un Perú que por más que luchó no pudo cambiar una historia ya reiterada. 

Los partidos que restan serán un calco de las eliminatorias anteriores, léase de mero trámite donde se jugará por el "honor" y donde escucharemos frases tan repetidas en nuestra realidad futbolística que hemos terminado por internalizar: "Trabajo a largo plazo" "Trabajo con menores" "Voltear la vista a los colegios", entre otros (1)

Rusia se divisa tan lejana como en su momento lo fue Japón- Corea, Alemania, Sudáfrica y Brasil y desde ya muchos planean el equipo con el cual se van a solidarizar en el próximo mundial apelando a argumentos tan risibles como "un país hermano" o una nacionalidad remota, constatando, una vez más, que la fiesta a la cual siempre estamos invitados, nos negamos a ir por nuestras propias limitaciones y es que no solo es el hecho de no participar en un mundial desde 1982, sino que es evidente que la selección peruana ha sido la que menos ha evolucionado en 34 años.

Al terminar el mundial de 1986 en México, para muchos quedó el romántico consuelo que fue el campeón del mundo el que nos negó la participación (2) Aquella tarde de junio, recuerdo tener entre mis manos la mascota oficial del anterior certamen, el popular "Naranjito" justo en el momento en que Diego Maradona besaba la copa obtenida.

-La próxima estará Perú- señaló mi padre al notar que miraba con nostalgia la consagración del equipo albiceleste ante la Alemania Federal de Franz Beckenbauer

Sin embargo, y aunque suene a perogrullada decirlo, no fue así. Las clasificatorias a Italia 90 y Estados Unidos 94 fueron un desastre para nuestro país en contraste con otro que se clasificaría después de 44 años y por primera vez en su historia por méritos propios: Bolivia. En aquella época, cuando todavía se jugaba en fase de grupos, luego de ganarle a Brasil (3), clasificó en un emotivo partido jugado de visita en el estadio Isidro Romero Carbo ante Ecuador. Queda para el recuerdo el desconsolado llanto de Marco Etcheverry, el popular "Diablo" quien jugaría solo 4 minutos y medio el certamen mundialista, al ser expulsado poco después de haber ingresado en el partido contra Alemania, partido que finalmente perderían.

Las eliminatorias a Francia 98 fueron las últimas en que la selección patria tuvo una oportunidad palpable de clasificar. La humillante goleada recibida en Santiago el 12 de octubre de 1997, permitió que los dirigidos por Nelson Acosta nos empataran en puntos y posteriormente clasificaron por mejor diferencia de goles. Aquel día, acorde con la fecha, terminamos por descubrir la fragilidad emocional del combinado nacional antes y durante el partido, personificado, entre otros, en la figura del capitán Juan Reynoso (4)

El partido ante Paraguay y el lema "Te amo Perú" en el polo de Roberto Palacios es el lindo recuerdo de una eliminatoria mala donde obtuvo su boleto para Corea -Japón un país que jamás había clasificado: Ecuador, el mismo que lo haría para Alemania 2006 y Brasil 2014. Mientras la imagen grabada para los dirigidos por Hernán "El Bolillo" Gómez fue la del gol del empate de Kaviedes ante Uruguay, para nosotros fue la del increíble gol fallado por Andrés Mendoza justamente ante el equipo ecuatoriano en el empate a dos en Lima.

Sudáfrica 2010 significó el retorno de Uruguay y Chile a la competencia. Ante los dos perdimos de terrible forma. El equipo de Forlán nos encajó media docena en Montevideo (5) y el de Marcelo Bielsa nos derrotó en la capital después de un cuarto de siglo. Aún tenemos presente el gol en el último minuto de Johan Fano ante Argentina en Lima, uno de los más gritados de la década, la casi poética narración del tanto por Daniel Peredo y el rostro de extremo fastidio del entrenador argentino Alfio Basile. El partido de vuelta pudo ser histórico. Bajo una lluvia torrencial, Hernán Rengifo empató el partido a los 45 minutos del segundo tiempo prácticamente dejando sin opción de clasificación al país de Quino (6); sin embargo, dos minutos después, Martin Palermo anotaría el gol del triunfo haciendo explotar de alegría el Monumental y en especial al entonces técnico Diego Armando Maradona.

La imagen imborrable hacia Brasil 2014 fue el llanto de Jefferson Farfán al término del partido perdido ante Uruguay en Lima con dos goles de Luis Alberto Suarez

Tenemos entonces que en los últimos 34 años, además de las selecciones de siempre: Brasil y Argentina, otras alternaron su clasificación: Chile, Uruguay, Paraguay, Colombia y una clasificó por primera vez en su historia: Ecuador (7) Bolivia, Venezuela y Perú se convierten en los grandes derrotados. Sin embargo, Bolivia participó en un mundial hace 22 años y Venezuela no es más el equipo goleable de años anteriores, más aun casi nos gana en marzo de este año en Lima si no fuera por la combinación entre Flores y Ruidiaz a 50 segundos de que finalice la contienda.

La selección peruana se convierte entonces en la gran derrotada de los últimos tiempos en esta parte del continente y así lo terminamos por constatar con el gol de Ronald Raldes que selló el 2-0 final para Bolivia, partido elegiaco donde, luego de apreciar el festejo de los dirigidos por Hoyos, el "Naranjito", que coloco al lado de la tv siempre que juega la selección, cae, sin que nadie lo toque, para romperse en pedazos, al igual que la ilusión de millones de peruanos de mi generación y posteriores a ella.

Enseguida, espero la típica frase de mi padre, el "Será la próxima" que repite a modo de consuelo cada vez que Perú es eliminado.

Pero esta vez solo encuentro silencio.

1. La única frase que posiblemente no escucharemos será la de "recambio generacional" en vista que desde la Copa América "Centenario" ya se está produciendo.

2.En realidad quien terminó por sepultar el sueño vino a ser Chile en los partidos de repechaje.

3.Lo cual significó para el entonces tricampeón mundial su primera derrota en la historia de las eliminatorias

4.Un amigo, que estuvo presente en ese partido me contaría años después que la silbatina durante el himno peruano era tan intensa que tuvo que taparse los oídos.

5.Donde fue expulsado Paolo Guerrero y el entonces técnico, José del Solar, insultaría descaradamente a sus dirigidos durante el partido

6. Un amigo presente en Argentina me contó que en el estadio se vivieron momentos casi surrealistas. Luego del gol del popular "Charapa" escuchó varios llantos de dolor, entre ellos el de un hincha con una camiseta de River Plate, el mismo que lo haría de alegría después del gol de Palermo, respecto del quien gritaba alocadamente: Sos un ídolo.

7. La cual clasificaría dos veces más.